De ante mano disculpas por tan alarmante título, pero quizás
de esta forma se detengan a leer y quizás luego con suerte emitan alguna
opinión sobre este postulado.
En Costa Rica, país en el cual hace tiempo se busca crear un
Colegio Profesional para Diseñadores Gráficos no se podrá lograr crear una
institución de este calibre por las siguientes
razones, de las cuales espero estar equivocado y usted lector puede
corregirme…eso espero.
Carencia de unidad.
Por más que todos los diseñadores del país se pasen llorando
en las redes sociales, el profesional costarricense en diseño es individualista,
separatista y egoísta. No tiene compañerismo y menos afinidad con sus colegas,
a las cuales no apoya y más bien le lanza críticas. En las empresas o búsqueda de
clientes siempre tratara de pisotear a su colega para obtener un puesto o ganar
un cliente.
Falta de profesionalismo.
La gran cantidad de profesionales graduados sumado a la gran
cantidad de efímeros personajes que dicen ser diseñadores, ha causado una
saturación de tal grado, que en lugar de mejorar la calidad del profesional,
más bien se ha convertido en una guerra de precios bajos y salarios mal pagados.
Como ofertas de supermercado ahora los clientes o empresas buscan a personas
que cumplan con requisitos, en ocasiones risibles dentro del área del creador
visual. Entonces vemos a muchos, como decimos popularmente “bajarse los
pantalones”. Muchos se oponen a la regulación, pues claro, en el orden las
empresas pierden y los que no son profesionales también.
Mala educación
El diseñador costarricense está mal preparado para enfrentar
la realidad del mercado. El diseñador costarricense piensa que es un artista y
muchos hasta se creen una especie de “rockstar”. Pero como se les puede juzgar,
los programas de las pocas universidades de diseño reales en Costa Rica tienen
programas más enfocados a las disciplinas artísticas que al enfoque mercantil.
Todas carecen de programas de continuad en especialidades como la programación,
desarrollo y diseño web, mercadeo, etc. Cada año están saliendo a la calle
muchos graduados, pues a las “instituciones” sólo les importa la cantidad de
alumnos en sus aulas, valor monetario y no la calidad de esos graduados. Esta
mala formación también termina influenciando al mercado, el cual cree que los
diseñadores son profesionales de baja clase o que es un ser milagroso que puede
realizar el trabajo de 4 o 5 profesionales por una baja paga.
Pero si usted cree que esto cambiaría con un Colegio
Profesional, pues está equivocado, en este país ningún colegio profesional se
mete con las instituciones de educación superior, aunque en sus estatutos se
encuentre dicha responsabilidad.
Una cultura de vagancia.
Por cultura general los costarricenses esperamos que otros
hagan las cosas por nosotros. Que nos dejen todo lo más fácil posible, para realizar
el menor esfuerzo. Por ello para crear un buen grupo preocupado para hacer un
Colegio de Profesionales, se debe cambiar un paradigma cultural demasiado
arraigado en las venas de los costarricenses
.
Para crear una institución seria, como un Colegio de
Profesionales no se puede esperar que asociaciones, sindicatos o cualquiera que
sea su nombre, busque realizar esa labor por nosotros. Estas agrupaciones
terminan siempre en un pequeño grupo o club, donde están pocos, esos pocos determinan
quien hace que y cortan el ideal original por lo que fueron creados.
Para crear un Colegio de Profesionales en Diseño en Costa
Rica, primero se deben unir una gran mayoría que tengan como único objetivo
lograrlo, sin irse por la tangente. Se debe realizar un estudio serio de la
situación nacional a nivel profesional, laboral y educativo. Luego realizar un
borrador de proyecto y mostrarlo a todos los sectores afines. Luego optimizarlo
para pasarlo a las instancias gubernamentales correctas y esperar para que sea
aprobado. Es un hecho que quienes luchen, lo hagan desinteresadamente y no
esperen tener poder por defecto dentro de la institución creada, para que el
esfuerzo no pierda credibilidad.
En fin… ¿ustedes que opinan?...
4 comentarios:
Lo que voy a decir, probablemente no me gane amigos. Ademas, creo que a quienes mas ofenda ya no les interesa mi opinion o mi amistad. Asi que no se pierde nada.
Y en todo caso, mi intencion no es ofender, es solo una opinion personal.
Desde hace tiempo ya, yo perdí la fe de que el famoso proyecto de Colegio de Comunicadores Visuales de Costa Rica se realice.
Nunca se dió un comunicado oficial al respecto, pero creo que no hace falta.
Segun lo último que escuché hace bastantes meses, sino ya mas de un año, las trabas legales, la falta de apoyo del mismo gremio y otros factores, frenaron o pausaron indefinidamente la iniciativa.
Hace mucho que no se ven mensajes, reuniones planeadas,actualizaciones, etc, por parte de ASODICOV, la Asociacion que iba detras de esta iniciativa.
No estoy acusando a nadie. De hecho, los esfuerzos que hicieron tienen mucho valor altruista.
Pero durante el tiempo que se veia mas activo el proceso, si vi un cierre a ideas nuevas y ayudas exteriores al circulo central de colaboradores, por mas que invitaran en palabra a las mismas.
Lo de un grupo pequeño tipo club, con necesidad de absoluto poder de desicion sobre lo que se hacia, pese a estar un poco justificado por el crédito de ser los que "se comen la bronca", creo que tambien iba muy de lado del EGO y de querer retener poder sobre el proceso. Esto lo unico que logró fué anular cualquier iniciativa paralela y de ayuda para fortalecer el proyecto (al menos yo vi completamente "lavada" mi voluntad en su momento).
Y sí, es un asunto de individualismo tambien y haraganeria.
Es tan simple como entrar a cualquier grupo de diseñadores ticos en FB, y se ve claramente que el 95% de los comentarios son sobre: Cuanto cobrar (nadie quiere tomarse el tiempo de hacer un presupuesto o un tarifario propio, quieren todo servido fácil y sin complicación), donde encuentran un proveedor (lo mismo, pereza) o puro berreo.
Siento que quienes lideraban la iniciativa del Colegio ya se hartaron, se cansaron y ahora solo aprovechan y dejan que siga creciendo el bulto de seguidores de sus grupos, pues esto siempre ofrece posibilidades a futuro.
Al fin y al cabo, ellos hicieron esos grupos y los resultados de ese esfuerzo y otras iniciativas son derechos que han adquirido por defecto.
Pero lo del Colegio es tan solo parte del CV de quienes trataron de hacerlo y una forma de dar credibilidad a sus grupos. No los culpo. Se ganaron ese derecho, como dije.
Decepcionado? No. No puedo culpar a nadie por hartarse de tratar de nadar contra corriente con la unica intencion de hacer diferencia y ayudar.
Si se retoma el proyecto, si veo que vuelven a mover la cosa. Pues genial. Solo espero que talvez planeen mejor la estrategia de como mejor ARREAR a un gremio desordenado, mal informado, super cargado de DIVAS, y realmente perezoso y con cero interes en cuestiones burocraticas, legales y administrativas.
Talvez los Diseñadores simplemente tenemos una estructura mental y una formación que imposibilita el organizarnos y trabajar juntos por nuestro propio beneficio.
Tienes razón Oscar, la mentalidad del diseñador en general esta cubierta por una total falta de interés y mucho berreo.
Adrián: Comparto todos sus puntos. Pero también le digo que el hecho que existan esas deficiencias en el gremio no hace imposible la tarea de hacer un Colegio de Profesionales en Diseño Gráfico. Todavía hay que limar muchos bordes, todavía quedan muchas cosas difusas. Todavía falta comunicación, falta apoyo de la industria, falta crecer y madurar como gremio. Esto no va a pasar en 1 año o 10.
No comparto la última frase. Los "diseñadores" no somos diferentes a cualquier otro profesional. No tenemos el cerebro configurado de manera diferente. Somos la misma cosa que los abogados, que los ingenieros, que los médicos, que los biotecnólogos. Da igual.
Incluso yo llegaría a pensar que lo que ocupamos es una catástrofe en la profesión para que nos unamos en pro de ALGO. Lo malo es que no hay ese algo, no hay un objetivo común real, concreto y llamativo, porque ahorita la gente hace lo que quiere y no ha tenido que enfrentarse a nada cataclísimico que ponga la profesión en alitas de cucaracha. Estamos en una zona de comfort terrible.
Igual, esperar a que haya un debacle profesional es iluso. Hay que trabajar con lo que hay. Y lo que hay es pura persuasión a largo plazo, un "1 a 1" donde yo como Diseñador Gráfico trato, mediante fundamentos y argumentos reales, persuadir al que sigue de que es necesaria una unión del gremio, para posteriores esfuerzos. Si cada uno de nosotros asumiera esa responsabilidad, las cosas se moverían más rápidamente.
Obviamente...pensando ya de antemano que la solución nunca llegará, predispone la intención de hacer cualquier cosa. Yo respeto que usted no crea. Que se canse, y que sea pesimista con respecto al futuro de nuestra profesión. Lo que no comparto es que mediante estas conclusiones predisponga a otros colegas. Es muy importante la actitud, y cada uno tiene que asumir la propia.
Cada quien lucha hasta donde puede/quiere. Lo importante es que si uno se sale de la lucha, no comprometa la misma planteándose una posición de reniego y de pesimismo.
Oscar: Si...tal vez lo que falta es una estrategia clara. Una definición de conceptos, una delimitación de tareas y de funciones. Siento que poco a poco se va dando. Pero ese problema no es sólo de Costa Rica, ese problema es global. En prácticamente todos los países donde hay este tipo de iniciativas, existen casi que los mismos obstáculos (falta de unión del gremio, intereses privados, etc).
Así que no es de extrañar que existan en Costa Rica también. Incluso...el gremio en Costa Rica es pequeño, comparado con los de Argentina, España o Brasil. Tenemos que enfrentarnos con menos cosas, entidades más pequeñas, un gremio relativamente pequeño al que unir, etc.
Yo por mi parte sigo conservando esperanza. Me he hartado, no lo niego. Pero sigo creyendo que la madurez del gremio llegará en algún momento. He visto atisbos de una madurez. Hay que rescatar el hecho de que el Diseño Gráfico es todavía una profesión joven (aunque hayan muchos que se jacten y vanaglorien en su experiencia y "sus años" en la misma). Es una profesión que en comparación con las "más viejas", sigue siendo inmadura y más todavía en Costa Rica. Acordémonos que ni siquiera está definida en las órdenes patronales.
En fin, yo aún conservo esperanza. Puede que me den 50 años, pero no hay que perderla.
Imposible no concordar con el texto. Tras muchas cosas que podría decir de vuelta, sólo me centraré en una, puntual e innegable:
El diseñador costarricense es el único y absoluto culpable de su propia situación laboral.
Yo he trabajado por muchos años con equipos de otros gremios (ingenieros, programadores, etc) y ahí se da uno cuenta de la diferencia fundamental entre ellos y los diseñadores: las dimensiones del ego. A los diseñadores nos puede más el divismo, el egoísmo y el separatismo. Y así no hay posibilidad alguna para que ninguna iniciativa que busque un bien común prospere.
Es cierto que la revolución tecnológica empoderó a muchos no-diseñadores a venderse como tales (y a inflar la oferta, bajando a su vez la demanda, el prestigio, los salarios, etc), pero no se puede achacar la precariedad laboral solo a este hecho. La nefasta práctica de "bajarse los pantalones", de vender o regalar el trabajo por cualquier cosa, de no saber vender ni venderse, de competir por migajas y de serrucharle el piso a los colegas (extensión de la ya de por sí ancestral costumbre tica) es lo que tiene al gremio en donde lo tiene. Ahora bien, nadie nace aprendido, todos fuimos el mae hiper explotado o del que se aprovecharon en algún momento, pero para eso se supone que uno aprende, madura y toma nota para no tropezar con la misma piedra de nuevo.
Pero sí. Un enfoque ni pesimista ni exagerado. Simplemente realista.
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